
Leonard, capitán de la nave miraba fijamente como el mecánico intentaba arreglar el motor de la nave mientras se tapaba la cara con un pañuelo para evitar el olor a podredumbre, Jimt giraba una tuerca, miraba el amasijo de hierros y cables y volvía a girar otra tuerca, el capitán ya cansado no pudo aguantar más tiempo en silencio.
-¿Cuánto tardaras en arreglarlo?
-No es fácil feje-La voz del mecanico era ronca y liquida hasta el punto que Leonard no sabía si se le iba caer de un momento a otro la dentadura o si por el contrario se le iba hacer añicos mientras que hablaba, pensar en ambas cosas siempre le revolvía las tripas-El motor de propulsión está bastante dañado, puedo arreglarlo pero no podrá ir a grandes velocidades hasta que consiga algunas piezas, eso supondrá unos 250 zodes, por otra parte podría arreglar el motor C.A.G para un salto pero no es muy recomendable dado que eso supondría una posible avería que nos llegaría a costar 500 zodes además de los 250 para arreglar el motor de propulsión y utilizar el motor de tiempo…bueno no creo que sea muy recomendable usar el mismo motor que fue el causante de las averías aunque claro están, es usted el que decide jefe…
-750 zodes son demasiados para poder pagarlos, es más del presupuesto que suele quedar después de pagar sueldos y gastos generales y aunque es cierto que este encargo debería darnos bastantes beneficios quisiera que por una vez no terminaran en arreglos de la nave.
-Bueno jefe, yo tengo ahorrado 25 zodes, también puedo pasar una temporada sin mi sueldo eso debería de cubrir por lo menos gran parte.
Leonard le miro sorprendido, era extraño que aquel hombre con cuerpo que se corrompía poco a poco, aquel mismo ser que en alguna ocasión había perdido un brazo al apretar una tuerca pudiera ser el mismo que años atrás había tenido su vida en sus manos y el cual le había salvado de una muerte señalada y sentenciada.
Leonard le miro sorprendido, era extraño que aquel hombre con cuerpo que se corrompía poco a poco, aquel mismo ser que en alguna ocasión había perdido un brazo al apretar una tuerca pudiera ser el mismo que años atrás había tenido su vida en sus manos y el cual le había salvado de una muerte señalada y sentenciada.
Después de un momento de cavilaciones por parte del capitán y mientras que Jimt seguía intentando arreglar el motor al final cerró los ojos de forma fuerte:
-Está bien-Dijo sin abrir los ojos-Daremos un salto y luego miraremos cuales han sido los daños, después de todo en teoría este encargo debería darnos suficiente dinero para poder comprar un motor nuevo…siempre y cuando no aparezcan más complicaciones.
Se puso ante la puerta y dijo su nombre completo.
Examen de voz…examen de voz con resultado favorable…reconocido Leonard Gómez Smid capitán de la nave…
La puerta se dividió en varias pequeñas piezas que se plegaron sobre sí mismas hasta dejar un espacio en la pared por el que el capitán paso, una vez fuera de la zona de motores las piezas se plegaron restableciendo la puerta.
Lo peor de tener a un zombi como mecánico era que tardaba mucho en arreglar el motor porque primero se tenía que arreglar a si mismo o que terminaba siempre comiéndole la cabeza a uno.
3 comentarios:
Mi estimado Alquimista, esto me resulta particularmente como re-leer algo que en algun momento tuve ya el placer de disfrutar. Sigue adelante; se que se pone interesante, y en nada logra atrapar. Vamos con el siguiente post !
Me alegra que te guste, espero no decepcionarte, ya estoy trabajando en la segunda parte.
me gusto mucho haber leido el blog,espero k sigas asi.te estare siguiendo.!!!!
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